miércoles, 25 de julio de 2018

Sentirte


Déjame sentir el flujo de tu deseo,
porque soñarte se me queda corto…
pensarte me sabe a poco,
con solo sentirte me basta.

Ángel negro


Ella se esconde entre las sombras, como un depredador al acecho, esperando pacientemente… Cuando menos te lo esperas, irrumpe, despacio, disimuladamente. Ángel negro de piel blanca, labios rojos y cabello negro y largo, que te seduce con su mirada, con su aroma, te susurra palabras al oído, incitándote a entrar en su juego.

Un juego. Eso es lo que todos piensan cuando caen, porque todos caen. “solo un poco” piensan, los incautos, “no hace daño probar, no soy un niño…”, pero, es más fuerte de lo que parece. Se da como algo divertido, un pasatiempo. Realmente, es poderosa, seductora, manipuladora, despertará tus más elementales instintos…

No lo ves al principio, porque al inicio todo son risas, nuevas experiencias, cosas a las que no le darás importancia, no las consideraras graves ni nada por el estilo.  Pero con el paso del tiempo te das cuenta de que no es tan agradable como parecía, esas sensaciones que despertaban tus deseos son ahora una fijación que te quita la calma. Esa emoción que un día te pareció algo tan nuevo, excitante y exótico, no es más que el amargo sabor de saber que nunca serás su dueño. Has malgastado tu tiempo en una noche fría y tormentosa…

Ella te ha poseído, tendrá el control absoluto de tus deseos más íntimos, haciendo que dependas exclusivamente de su presencia y ese erotismo tan suyo… Vas cayendo sin remedio en su espiral de promesas y de deseos ardientes que luego ella arrugará y arrojará al suelo, mientras las lágrimas corren por tu rostro.

No te cabe en la cabeza que, algo tan sublime pueda ser capaz... pero, de esto es capaz de hacer un ángel con el alma rota.

Lunaoscura


miércoles, 18 de julio de 2018

A tientas


A tientas, busco tu cuerpo,
a tientas disfruto del más íntimo
de los placeres.

Mis sentimientos, rozo en tus labios y,
las yemas de nuestros dedos se juntan;
desesperación, muerte y lujuria.

Suelta, para ti amiga mía.


Suelta esas amarras,
iza de nuevo tus velas
a una nueva aventura.


Deja atrás
esas falsas expectativas;
él no es.


Frágil

Abbracio, Amore - julie
Estoy en modo fragilidad pura. Y es que no sabes cómo me hace falta un abrazo, pero no cualquier abrazo… tiene que ser tuyo. De tus brazos, necesito acunarme en tu regazo y en el infinito momento de ese abrazo, cubrirme poco a poco con tu amor, fortalecer mi piel con tu cariño. Fragilidad bordeando mi piel, y un grito ahogado de mi garganta… puedo escucharme gritar te necesito…



Manuel Recinas

jueves, 12 de julio de 2018

Consuelo


Atrápeme en tu locura,
quiero perderme
en la fogosidad de tu cuerpo.

Yo te susurrare al oído,
bajito, muy bajito
¡Cuánto te deseo!

La calma voz de un leve suspiro
me llena el alma de ti y,
yo cierro los ojos por fin…

Lunaoscura


martes, 10 de julio de 2018

Conspiración


A pocos pasos frente a mí, un hombre de aspecto siniestro y desaliñado me miraba fijamente. Parecía inquieto, como sí se escondiera de alguien. Sigilosamente, se acercó a mí.

- Oye, lo tengo ya todo planeado - dijo con un tono de conspiración. 

- Ah, ¿sí? – respondí lacónicamente. 

- Sí, pero… -se interrumpió súbitamente, mientras observaba al policía que se encontraba parado en la esquina. Su rostro reflejaba un profundo desprecio, con un ademán, lo señalo y con voz firme y rotunda, indico- Necesito que te encargues de “ese”.

Miré al uniformado y volví la vista a mi interlocutor. Guarde silencio, él hombre me miró por unos pocos segundos, como tratando de tener certeza de que había entendido, para después dar la media vuelta e irse.

Una vez que el hombrecillo desapareció de mi vista, en mi mente, me repetía, siempre has sido un profesional, falta más faltaba menos.

Días después, en mi casillero, encontré una carpeta con una serie de papeles, donde se describía detalladamente el plan para llevar a cabo el homicidio y la fuga. 

Mi desconcierto fue mayúsculo, en qué momento me había convertido en cómplice de un homicidio. Trate de tranquilizarme, este asunto no podía afectarme y mucho menos implicarme. No obstante, decidí hacerlo del conocimiento de mi jefe, no fuera ser que este lío me trajera complicaciones.

De manera concisa, narre a mi jefe la situación. Él me escuchaba con atención, pero en su semblante se dibujaba una mueca burlona que me incomodaba. Cuando finalmente termine de hablar, él socarronamente, me dijo.



- ¡Martínez, por Dios no debe preocuparse! 

- Lo sé, pero aun así… -refuté. 

- Martínez, estamos hablando de enfermos mentales. Los de seguridad los tienes bajo control, además están medicados, esos los tranquiliza. Hombre, no tiene nada de qué preocuparse.

Algo más tranquilo, volví a hacer mis rondas por las salas del psiquiátrico ante las atentas y confidentes miradas del paciente que, cada cierto tiempo, pedía incansable, mi colaboración. 

Lunaoscura

Casualidad


Dos extraños bailando
bajo la luna, al compás
de una melodía extraña
llamada casualidad.

Danzan al vaivén del viento,
como dos jirones de nube
que unen sus soledades
en un abrazo tierno.

El hielo abrasador
de sus heridas ya no duelen,
sus corazones se estremecen
en ese descanso tan cansado.

Su andar solitario
de su libertad encarcelada
ha quedado en el olvido
de un pasado menguado.

Aprenden a decir “Te amo”
como nunca lo habían dicho;
palabras que nacen del alma y,
palpita como una nueva sinfonía.


Lunaoscura