lunes, 19 de septiembre de 2016

Abrahel

Nací hace algunos años en ningún lugar que conozcas. Abrahel, es mi nombre. Soy la personificación de las fuerzas de lo nulo o la nada. He jugado siempre un papel activo en la historia entre Dios y la Humanidad. Como súcubo, seduzco a los hombres, a través de la interacción sexual. Absorbo su energía vital y ejerzo un influjo moral y espiritualmente nocivo.

Mi labor se inicia en las horas de sueño. Visito hombres que emiten vibraciones astrales de deseos sexuales intensos y frecuentes. Mi contacto con ellos es desde el plano etéreo. Los humedezco con fluidos energéticos de deseo carnal, fluidos que lo incitaran a desarrollar perversiones y que siempre aumentaran su lujuria. Causándoles ansiedad, miedo y vergüenza.

Se preguntarán, por qué los demonios realizamos este trabajo. Por lo mismo que los humanos trabajan, para obtener placer.

Pero, a veces me dan tanta lástima. Me gustaría iluminarlos, gritarles a la cara que esa tendencia de ver a la sexualidad como algo sucio y a experimentarla muchas veces como algo que produce culpabilidad, vergüenza y angustia, sobre todo cuando se da fuera de las expresiones socialmente bien vistas, Se ha originado al asociar sexo-mal-Demonio... Pero la verdad, es más divertido verlos dañarse. Amo mi trabajo.

¿Por qué escribo esto?... Adivina.

Lunaoscura

No hay comentarios:

Publicar un comentario