Son tantas preguntas
que abruman la razón, y
enlutan al corazón.
No se trata de ego engreído,
son esas deletéreas mentiras
susurradas a un alma anhelante.
Esos temores se vuelven lastre
que encadenan a la razón
en un abatir constante.
Las palabras suaves,
se volvieron vino amargo;
entelequias delirantes.
Aprensiones que envenenan
corazones esperanzados, y
a los amantes condenan.
Lunaoscura
No hay comentarios:
Publicar un comentario